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Prevencion e Intervencion en las dificultades de aprendizajes
Tipo: Esquemas y mapas conceptuales
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Prevención e Intervención en las dificultades de aprendizajes, comportamiento y socioemocional en niños, niñas y adolescentes. Las dificultades de aprendizaje son un término genérico que se refiere a un grupo heterogéneo de trastornos, manifestados por dificultades significativas en la adquisición y uso de la capacidad para entender, hablar, leer, escribir, razonar o para las matemáticas. Estos trastornos son intrínsecos al individuo, y presumiblemente debidos a una disfunción del sistema nervioso, pudiendo continuar a lo largo del proceso vital. Pueden manifestarse problemas en conductas de autorregulación e interacción social, pero estos hechos no constituyen por sí mismos una dificultad de aprendizaje. Aunque las dificultades de aprendizaje se pueden presentar concomitantemente con otras condiciones discapacitan (por ejemplo déficit sensorial, retraso mental, trastornos emocionales severos) o con influencias extrínsecas (como diferencias culturales, instrucción insuficiente o inapropiada), no son el resultado de dichas condiciones o influencias El perfil más generalizado de dificultades de aprendizaje se caracteriza por tener una inteligencia de tipo medio, déficits neuropsicológicos selectivos y un rendimiento académico inferior al esperable en función de su CI. Varios estudios ponen de relieve un rendimiento verbal inferior al manipulativo (Portellano, 1993). La evaluación deberá ir dirigida a explorar cuatro aspectos principalmente:
La evaluación inicial, antes de comenzar el tratamiento, es útil para valorar la evolución seguida en el tratamiento y no perder el norte. Muchas veces ocurre a los terapeutas que trabajan con niños con dificultades de aprendizaje, que pierden la referencia de la normalidad, por eso la valoración utilizando baremos nos ayuda a tomar conciencia de la dificultad real del niño. Esto no anula el mérito de la observación directa del terapeuta. Los datos objetivos (provenientes de los tests) y los subjetivos (provenientes del terapeuta) son complementarios. Por lo que respecta a los aspectos Intelectuales, algunas características comunes de las DA en el adulto, encontradas a partir de la valoración de la escala de inteligencia Wechsler, son las siguientes:
(posteriormente en este artículo se abordarán). Los niños en general se encuentran en situación de riesgo y describir las situaciones o establecer esta clarificación, en ocasiones se puede convertir en algo tautológico. La mayoría de los niños con bajo rendimiento, no tienen posibilidad de acceder fácilmente a procesos de acompañamiento especializados, por un equipo de apoyo, lo que hace que se presenten deserciones escolares, bajos procesos de estabilidad en el aprendizaje, incremento de trastornos comportamentales y de aprendizaje. La intervención psicopedagógica se desarrolla de forma rigurosa y secuencial en el tiempo. Por ello, para llevarla a cabo se debe tener en cuenta la intencionalidad de enseñar del profesorado, la de aprender del estudiantado y los contenidos de aprendizaje. De estas variables se deriva que el proceso de intervención psicopedagógica se centra en tres objetivos principales: Comprender cómo se genera la intencionalidad en el estudiante. Ser capaces de diagnosticar, desde principio de curso, el nivel de intencionalidad experimentado por los estudiantes a través de ciertos marcadores. Finalmente, examinar el impacto que tienen dichos marcadores en el aprendizaje y rendimiento del estudiantado. El proceso de intervención psicopedagógica involucra a diferentes actores de la comunidad educativa. En tal sentido, la participación implica a las familias, los docentes y al estudiante, así como a otros actores e instituciones del contexto social y escolar. La medición de los factores que nos garanticen una mejora en el proceso de enseñanza/aprendizaje permitirá comprobar la calidad de los resultados y la satisfacción alcanzada por todas las personas que han participado en la intervención psicopedagógica realizada. Unos malos resultados por parte del profesorado y/o alumnado, acompañados de poca satisfacción respecto al proceso seguido, significará que uno o varios
componentes del proceso han funcionado de forma deficiente y convendría, por lo tanto, revisarlos. Por todo esto, la psicopedagogía brinda un mayor conocimiento de los procesos de enseñanza/aprendizaje actuando en diversos contextos. Centrándonos en las instituciones educativas formales y, en concreto, en el aula. Algunos ejemplos de intervenciones psicopedagógicas pueden ir dirigidos a la atención a la diversidad, el establecimiento de adaptaciones curriculares, el trabajo a través de metodologías diversas o la colaboración en la detección de necesidades educativas especiales, entre otras. Además, a través de la acción tutorial, se pueden proponer dinámicas y programas de socialización, convivencia, prevención y/o contacto con las familias para el desarrollo personal, académico y profesional de forma personalizada o brindando una atención grupal. Modelos de la intervención psicopedagógica La orientación educativa cuenta con una serie de modelos de intervención psicopedagógica que suponen diferenciados modos de organización, los cuales ofrecen distintas posibilidades de acción (Bausela, 2004). Estos modelos sirven como marcos de referencia a la hora de diseñar la actuación de los profesionales de la orientación en el contexto educativo (Castellano, 1995), adoptando distintas estrategias para conseguir unos resultados propuestos. Las características de los modelos de intervención son las siguientes: Modelo clínico: consiste en una intervención directa e individualizada de carácter eminentemente terapéutico. Se concreta en la entrevista como procedimiento característico para afrontar las necesidades evidenciadas. Este modelo establece una relación directa entre el orientador y el/la estudiante. El proceso de orientación se produce en tres fases: solicitud de ayuda, diagnóstico y tratamiento. Un ejemplo del modelo clínico en el contexto educativo sería la atención brindada a un estudiante referido a la Unidad de Orientación y
Modelos mixtos : resultan de la combinación de modelos básicos, pero, además, combinan enfoques de orientación, atributos, dimensiones y contexto. Modelo psicopedagógico , la intervención se caracteriza por ser comprensiva, indirecta (se potencia la intervención por programas) grupal, interna y proactiva. Es comprensivo, en tanto que favorece el desarrollo de capacidades como el autoconocimiento, las habilidades sociales y la toma de decisiones, fundamentales para el desarrollo integral de los estudiantes. Se toma en cuenta el colectivo, como un todo al momento de planificar las acciones, caracterizándoles en función de sus procesos de desarrollo y de su nivel educativo. Ajustes curriculares individualizados Los ajustes curriculares individualizados son una vía más de respuesta a la diversidad, por lo que deben ser realizados cuando la planificación del aula diversificada no sea suficiente para dar respuesta a determinadas necesidades de un o una estudiante. Estos ajustes constituyen una estrategia de planificación y de actuación docente para tratar de responder a las necesidades de aprendizaje de cada estudiante. A través de ellas, el o la docente guía la toma de decisiones con respecto a que es lo que él o la estudiante debe aprender, cómo y cuándo. En tal sentido, es necesario que las y los docentes conozcan sus estudiantes, sus necesidades y todos los aspectos curriculares correspondientes al grado en que labora. Estos ajustes curriculares se realizan en las situaciones de cambios metodológicos que van a implicar una ayuda más individualizada del profesorado. En otros casos van a suponer ajustes en los contenidos rescatando algunos trabajados anteriormente o introduciendo cambios en la secuenciación o eliminando alguno que no se considere básico.
Los ajustes referidos al acceso al currículo suponen modificaciones en los espacios, provisión de recursos materiales y el empleo de sistemas de comunicación que facilitan el desarrollo de las enseñanzas previstas. Las adaptaciones curriculares significativas se producen cuando el desfase curricular con respecto al grupo de edad del estudiantado implique la modificación de los elementos del currículo, incluidos los indicadores de logros de las competencias del grado y los criterios de evaluación. Estos ajustes requerirán una evaluación psicopedagógica previa realizada por la Unidad de Orientación y Psicología con la colaboración de los diferentes actores de la comunidad educativa implicados en el proceso de aprendizaje de las y los estudiantes. El Sistema Educativo Dominicano establece el rol o funciones del Psicólogo Escolar, estas son las mismas que las del profesional de la Orientación, a sabiendas de que son dos formaciones distintas, situación que se torna difusa para ambos. En lo particular nos parece que en este sentido el MINERD, debe abocarse a la delimitación de roles. Por una parte, el Orientador en su formación profesional esta enmarca en la naturaleza pedagógica y el Psicólogo Escolar cuya formación es de naturaleza psicológica, enfocada en las observaciones, evaluaciones e intervenciones de características psicopedagógicas y psicología educativa. El Psicólogo Escolar estudia la conducta y cognición que realizan los aprendices en situaciones que implican las distintas maneras de procesar información, lo que generalmente suelen ser contenidos académicos, su conducta ante los mismos, para así ayudar en el aprovechamiento y adaptación, tanto en los centros educativos como en el hogar y la comunidad. Es por esta razón que abordaremos definiciones de psicología, psicología escolar o educativa y análisis, de manera que puedan ser entendidas las funciones y competencias propias de la formación. Psicología Educativa: es la rama de la psicología que estudia sistemáticamente principios y problemas psicológicos que se refieren a la educación la misma proporciona un marco de referencia para observar al
intervenciones apropiadas que garantizan aprendizajes significativos del aprendiz. Poseedor de habilidades mediadoras en conductas problemáticas, capacidad de empatía, entrenamiento en el manejo para orientar a los estudiantes en habilidades para la vida. Competencias para la elaboración charlas, seminarios, ponencias, panel; relativas al desarrollo y crecimiento humano en el contexto educativo: profesores, estudiantes, padres y comunidades. Diseña y elabora materiales para trabajar las dificultades de aprendizaje y crea espacios motivadores que facilitan la concentración. Agente preventivo de conductas inapropiadas: manejos de rótulos, acoso escolar, discriminación de cualquier índole, abusos psicológicos, emocional, lenguaje gestual y/o no verbal. Facilidad para la implementación de programas de modificación para la adquisición de conductas prosociales, motivadoras en las tareas académicas, maneja adecuadamente el uso de actividades de refuerzo. Orienta y da seguimiento a los estudiantes y padres para el diseño de ambientes que faciliten el proceso de aprendizaje, ofreciéndoles asesorías para que implementen adecuados hábitos de estudios y el uso de estrategias personales. Análisis La definición de Dificultad de Aprendizaje implica una debilidad (leve, moderada o severa) en alguna función necesaria para el aprendizaje. Es frecuente que esto ocurra en el área de lectura, escritura o matemáticas. Se cree que la causa es una disfunción cerebral mínima, lo cual se convierte en un obstáculo real para aprender de manera tradicional. Para los padres y maestros no es fácil entender qué pasa con estos niños y terminan por rotularlos, sobreprotegerlos o castigarlos.
Para impedir que estos niños sufran innecesariamente, he aquí algunos mitos y verdades del tema. “Los niños con Dificultad de aprendizaje son malos estudiantes, les cuesta aprender y no son elocuentes” Ellos tienen una inteligencia normal y, en muchos casos, son niños excepcionalmente inteligentes. Algunos expertos hablan de cerebros superespecializados. El asunto es que también tienen debilidades importantes, como problemas motores y de memoria. Son perezosos y por eso les va mal. Todo niño quiere tener éxito. Además, viene genéticamente programado para aprender y desarrollarse. El niño con Dificultad de aprendizaje se desmotiva, pues se cansa de invertir tanto esfuerzo sin resultados. Muchos niños, para defenderse, prefieren ser tildados de perezosos antes que de incapaces. La motivación solo se logra con el éxito. El niño es disléxico. Confunde e invierte números, letras e, incluso, palabras. Todo niño pequeño invierte letras y números. Esto sucede con frecuencia hasta los 7 años. Si esto no desaparece, puede ser un problema de percepción visual, lateralidad o manejo del espacio. A los disléxicos también les pasa esto, pero lo que define la dislexia es la incapacidad de leer bien. “Si no lo consintieran tanto, este niño aprendería” Un problema de aprendizaje es una dificultad real que hace que los adultos sobreprotejan y ayuden más al niño que ven vulnerable. Un niño con Dificultad de aprendizaje sí comprende, pero a otro ritmo y con otros métodos, y va a necesitar apoyo adicional con las tareas. “Yo era igual, siempre inquieto y mal estudiante, pero no necesité ayuda” Esta es una frase que les oímos decir con frecuencia a los padres. Es difícil aceptar que un hijo pueda tener una dificultad. Los problemas de aprendizaje han existido siempre. Si estos padres los tuvieron, seguramente no se les diagnosticó y tal vez no estén tan bien como ellos creen. Muchos adultos han pagado un precio alto en términos de autoestima por no entender qué les